El desarrollo de la energía hidroeléctrica conlleva ciertos costes medioambientales y sociales. Entre las consecuencias negativas, en especial en proyectos a gran escala, están la deforestación, el impacto en la vida marina y el desplazamiento de grupos étnicos
El desarrollo de la energía hidroeléctrica conlleva ciertos costes medioambientales y sociales. Entre las consecuencias negativas, en especial en proyectos a gran escala, están la deforestación, el impacto en la vida marina y el desplazamiento de grupos étnicos. Un problema adicional al que se enfrenta