Respuesta:
El chocolate y el ciclo del carbono
O lo que es lo mismo, como influye el que comamos chocolate en el cambio climático. Así de primeras, parece difícil encontrar la relación, pero es mucho más directa de lo que pensáis. En primer lugar, el árbol del cacao debe tener unos 5-6 años para empezar a producir este rico fruto. Durante estos años, como cualquier otro árbol, habrá capturado CO2 de la atmósfera, compensando en cierto modo nuestras emisiones. Estas emisiones capturadas son automáticamente devueltas a la atmósfera en el mismo momento en que ese árbol deja de existir, y lo mismo ocurre con el CO2 capturado por el fruto del cacao al crecer que vuelve a la atmósfera mediante nuestra respiración después de ingerirlo.
Resumiendo, como el chocolate viene de un árbol, forma parte del ciclo del carbono, capturando CO2 mediante la fotosíntesis que le permite crecer.
¿De qué otro modo influye el chocolate en el cambio climático?. Pues como hemos anticipado, este árbol crece únicamente en ciertas regiones tropicales, por lo que para que seamos capaces de comerlo en nuestra casa, este tiene que ser enviado a través de kilómetros y kilómetros, primero a las fábricas de chocolate como ingrediente, luego a las fábricas de chocolatinas, bombones y tabletas, después a las tiendas y finalmente a nuestras casas.
Explicación:
¿Huella social del chocolate?
Antes de nada, definamos qué es la huella social del chocolate; es el impacto tanto positivo como negativo que tiene el chocolate a lo largo de todo su ciclo de vida, desde la plantación de cacao hasta que lo saboreas en tu boca en la sociedad involucrada.
Los puntos positivos a priori son bien fáciles de identificar, de hecho el chocolate es un alimento que, consumido con mesura, aporta grandes beneficios (os dejo este artículo de Laura López altares, experta en artículos de gastronomía, entre otros).