Respuesta:
Estos nacionalismos surgieron en el siglo XIX basándose en el concepto de nación; es decir, cada pueblo se considera a sí mismo como una nación y debe tener derecho a crear un Estado independiente. Este concepto de nacionalismo nació por la influencia de las ideas la Revolución Francesa.
En el territorio imperial cohabitaban un gran número de nacionalidades: alemanes, checos, polacos, rumanos, húngaros, italianos, ucranianos, croatas, eslovacos, eslovenos, serbios, y otros grupos menos numerosos; por esta razón existía un gran mosaico cultural en la región.