Explicación:
Depende del contexto. En general, el aumento de los niveles de los lagos puede ser positivo porque puede mejorar la disponibilidad de agua para usos humanos, agricultura y generación de energía hidroeléctrica. Sin embargo, también puede ser negativo si causa inundaciones, daños a la propiedad y a la infraestructura, y puede tener un impacto negativo en los ecosistemas acuáticos y las especies que dependen de ellos. En resumen, el aumento de los niveles de los lagos puede ser positivo o negativo dependiendo de las circunstancias específicas.