Respuesta:
La ley de los signos para la multiplicación de decimales se refiere a la regla que establece que si los dos números involucrados en una multiplicación tienen el mismo signo (+ o -), el resultado de la multiplicación será un número positivo. Por otro lado, si los dos números tienen signos opuestos, el resultado será un número negativo. Por ejemplo, si multiplicamos 3.2 × -2.5, el resultado será -8.