Conocida en Latinoamérica como lengua de suegra, o de tigre, tiene la cualidad de liberar oxígeno aún cuando su proceso de fotosíntesis ha terminado. Esto se debe a que la planta, de origen africano, es resistente a una atmósfera árida y con poca luz, por lo que su proceso de fotosíntesis se extiende a la noche.