Respuesta:
Qué pasaría si desapareciera el dinero físico? ¿Es posible un mundo sin efectivo? Responder a esta pregunta no es nada sencillo, pero sí se puede dar un panorama posible (y visible) para los consumidores. A continuación, los puntos clave para entender y verificar un posible planeta dominado por la digitalización.
El mundo sin efectivo
La ausencia total del dinero físico en el mundo podría a llegar a generar grandes cambios en la vida cotidiana de las personas e instituciones. En primer lugar, para el Estado, sería una ventaja. Por un lado, no habría costos del papel de la moneda y habría un mayor control de las operaciones de los ciudadanos y sobre la evasión fiscal (que se reduciría). Por otro lado, en un hipotético mundo sin efectivo, el trabajo “informal” o “en negro”, desaparecería.
En este planeta más digitalizado, a su vez, habría un sistema digital de mayor penetración, donde las plataformas online serían mucho más “cercanas” y de fácil acceso. El desarrollo de las tecnologías logró que, tanto en el país como en el mundo, surjan diversas alternativas al efectivo. En este sentido, habrá cada vez más soluciones de pagos digitales para una mayor utilidad de este sistema.
Con este contexto, las compras online se elevarían y el denominado comercio electrónico tomaría una trascendencia aún mayor. Dichas plataformas mejorarían sus procesos. La suma de la variedad de formas de pagos y el aumento de la rapidez a la hora de hacer la compra y la entrega, harían que el número de usuarios crezca de manera significativa