A través de las normas el niño aprende qué está permitido, y qué no, y para ello es necesario decirle en ocasiones “no”, y mantenerlo siempre que sea necesario. La forma en la que nos comunicamos en la familia es fundamental para establecer con éxito los límites y las normas.
La norma es la forma en que se traducen los límites en el día a día. Cada familia ha de establecer sus propias normas. Los límites proporcionan seguridad al niño para enfrentarse al mundo. Las normas marcan la organización necesaria para que una familia, y por extensión cualquier otra forma de convivencia funcionen.