Respuesta:
HISTORIA DE LA ENFERMEDAD.
La altamente contagiosa enfermedad respiratoria aguda conocida ahora como influenza,
parece que ha afectado a los humanos desde los
tiempos antiguos. La súbita aparición de enfermedades respiratorias que persisten por pocas
semanas e igualmente desaparecen, son características suficientes para identificar un número
de epidemias mayores en el pasado. Una de estas epidemias fue reportada por Hipócrates, el
padre de la Medicina, en el año 412 a.C. Numerosos episodios similares también fueron descritos en la Edad Media.
El término influenza fue introducido en Italia al inicio del siglo XV para describir una epidemia que fue atribuida a la influencia de las estrellas. El término fue adoptado por los Ingleses en el siglo XVlll; durante el mismo período
los franceses denominaron la enfermedad como
la grippe.
Una descripción precisa de las principales
características de la influenza es contenida en una
carta enviada desde Edimburgo por Lord Randolph a Lord Cecil en Noviembre, 1562:
“Inmediatamente que la Reina (María) llegó aquí, ella cayó con una nueva enfermedad que
es común en este pueblo, llamado aquí la acquayntance, la cual pasó a toda su corte, ya sean
estos lords, ladies o damiselas o ya sean Ingleses o Franceses. Es una plaga en sus cabezas, y
dolor en sus estómagos, con una gran tos, que
en algunos permanece por más tiempo que en
otros, mientras encuentra cuerpos aptos para desarrollarse. La Reina estuvo en cama por seis
días. No hubo peligro, no muchos murieron por
la enfermedad, excepto algunos amigos ancianos. Mi Lord de Murraye está enfermo ahora, el
Lord de Lidlington la ha tenido, y yo estoy asombrado de decir que he estado libre de ésta”
La primera bien recordada pandemia ocurrió en 1580 y se creyó se originó en Asia; de
ahí se dispersó a Africa y Europa. La mortalidad fue alta en algunas ciudades e indudablemente fue altamente incrementada por la práctica de sangrar al enfermo para reducir la fiebre.
Durante los siguientes tres siglos, a pesar de que
el seguimiento fue irregular y no muy preciso,
hubo un número definido de pandemias (junto
con las epidemias intermedias), en las que los
historiadores están de acuerdo. La investigación
retrospectiva en la década pasada ha aclarado
parcialmente la naturaleza de la pandemia de
1889 al probar anticuerpos para influenza en el
suero de gente que vivió en ese tiempo. Sin embargo, no fue sino hasta 1930 que un virus específico fue identificado como la causa de influenza, siendo el comienzo de un mejor entendimiento de la enfermedad.
En términos de números de las víctimas
humanas, la gran pandemia de 1918-19 fue sin
precedentes. Estimaciones van de un mínimo de
20 millones de muertes en todo el mundo hasta
más del doble de este número. Más de 500,000
muertes fueron reportadas en los Estados Unidos, y en otras partes del mundo fueron iguales
o gravemente mayores. Una autoridad estimó 20
millones de muertes sólo en la India. Algunas
partes de Alaska y las islas del Pacífico perdieron más de la mitad de su población.
Hubo una vasta destrucción a través de los
E.U. y la calidad de la vida comunitaria en muchas ciudades llegó a ser mínima. Unos 25,000
casos clínicos de influenza fueron observados
durante el invierno de 1918-19: un cuarto de la
población total. Sólo en Filadelfia durante la tercera semana de Octubre, 1918, hubo 4,600
muertes por influenza. La mayoría de las ciudades principales y otros lugares públicos fueron
cerrados, y los hospitales estaban excedidos y
faltos de servicios médicos. Adultos sanos previamente, enfermaron y murieron en un lapso de
24 horas. Familias enteras padecieron, en la soledad de la enfermedad, a pesar de un gran grupo de servicios voluntarios en todo el país. Existieron remedios grotescos, pero al final el único
tratamiento efectivo fue un buen cuidado por
enfermeras.
fin