Respuesta:
El motor transforma la energía de combustión interna, la eléctrica o la combinación de ambas en energía que permite generar un continuo impulso mecánico cuya fuerza hace girar las ruedas para que el coche pueda desplazarse.
Motores de combustión interna: logran su funcionamiento gracias a la transformación del calor que genera la gasolina o cualquier otro combustible, en la energía que necesita el vehículo para moverse. Son y han sido los motores más comunes en muchos años.
Motores eléctricos: la electricidad es el combustible que pone en funcionamiento el motor. La energía eléctrica se transforma en energía mecánica a su paso por el rotor y el estator, que actúan como imanes produciendo un campo magnético para que el coche se mueva.
Motores híbridos: funcionan por la energía producida a través de propulsores eléctricos o la combustión interna del combustible, en su mayoría gasolina. Ambos acaban produciendo energía mecánica. Los dos tipos de alimentación de motor pueden funcionar al mismo tiempo.